Vecinos de los diferentes barrios de la urbe alteña denuncian la proliferación de licorerías, donde a margen de la venta de bebidas alcohólicas, dichas actividades económicas generan la presencia de bebedores durante las 24 horas.
La denuncia de los habitantes de los diferentes distritos de esta urbe, son constantes ante las autoridades policiales y municipales, pero poco o nada hacen para detener el crecimiento ilegal de estos negocios que no cuentan con un permiso legal de funcionamiento otorgado por el municipio.
Barrios como la Ceja de El Alto conocido como el casco viejo, Ballivian, Rio Seco, Villa Dolores, Ciudad Satélite entre otros se han visto con la apertura indiscriminada de este tipo de negocios, donde el funcionamiento de los mismos son las 24 horas del día, faltando las normas establecidas por el municipio de los horarios de restricción que existe para el funcionamiento de los estas actividades económicas.
La presencia de estas tiendas ilegales que tienen como aviso el encendido de luces azules fosforecentes, los cuales en muchos de los casos una cuadra de un determinado barrio, existen más de cuatro de estos negocios.
De acuerdo con la denuncia de los vecinos de estas zonas estos negocios al margen de la venta de todo tipo de licores en su mayoría de dudosa procedencia, admiten que los grupos de personas que compran estos licores, consuman en la puerta de los mismos negocios, actitud que se convierte en un peligro ya que el estado de ebriedad en el que se encuentran son agresivos y en muchos de los casos terminan asaltando a los transeúntes.
Los habitantes de estos barrios señalaron que producto de la inseguridad que significan estas licorerías, denunciaron en muchas de las oportunidades antes las autoridades del municipio, para que puedan ser clausurados las mismas o en otro caso para que se sometan en el cumplimiento de ciertos horarios de apertura, pero a la fecha no existe ningún resultado favorable.
“Hemos pedido el cierre de estas licorerías de forma definitiva, porque generan mucha peligrosidad hacia nuestros hijos que por diferentes motivos de estudio o trabajo nuestros hijos llegan de noche, pero con muchos riesgos de que sean atracados por estos grupos de personas que toman en las puertas de estas licorerías o utilizan los parques y plazas para consumir bebidas alcohólicas”, denunció un vecino de la zona de Rio Seco.
ADVERTENCIA
Producto de todos estos problemas los vecinos de estos barrios advirtieron que de no ponerse un alto a la proliferación de estos negocios y la implementación de normas de funcionamiento con horarios específicos, se verán obligados a actuar de forma inmediata para el cierre de estas actividades económicas.
“Ya estamos cansados de aguantar la presencia de estas licorerías que se han convertido en un verdadero peligro para la integridad física de nuestros hijos, por eso vamos a dar un tiempo perentorio al municipio para que normen o finalmente clausuren de forma definitivas estos negocios”, advirtió un vecino. (RPnoticias)